Desde su creación, la Bolsa de Valores se ha transformado y evolucionado, enfocándose en: la innovación tecnológica a través de plataformas de negociación 100% electrónicas, el fortalecimiento del control interno a través de la constante actualización de los procesos e implementación de políticas que la contribuyen a la transparencia del mercado, el impulso de nuevas leyes y el establecimiento de normas de ética y conductas que nos permitan mantener los más altos estándares de seguridad y eficiencia.
La Bolsa ha desarrollado un papel relevante en el ámbito económico nacional, al facilitar la desintermediación financiera, permitiendo el acercamiento directo entre empresas e inversionistas a través de la negociación de instrumentos financieros como acciones, bonos y otras opciones para canalizar dinero hacia las necesidades de financiamiento de las empresas e instituciones públicas.
En el 2001, inició los pasos hacia el logro de un sueño: ofrecer a los inversionistas salvadoreños un supermercado financiero con valores de todo el mundo. Así mismo, en su constante búsqueda de nuevos productos innovadores en beneficio del mercado, en el 2012 se implementó la Titularización, figura a través de la cual se han logrado financiar diversos e importantes proyectos. En septiembre 2014 se aprobó la Ley de Fondos de Inversión, marcando el inicio de una nueva etapa en el desarrollo económico del país, al ser, los fondos de inversión un motor de crecimiento en dos vías: democratizando la inversión en Bolsa y dinamizando el financiamiento para el sector privado y público.
Nos hemos trazado importantes metas a futuro, facilitar la creación y desarrollo de la Industria de Fondos de Inversión, consolidar la Integración de los Mercados Centroamericanos y construir las bases para que PYMES y otros sectores estratégicos de la economía accedan al financiamiento bursátil, todo ello en la búsqueda por impulsar el crecimiento del mercado de valores en El Salvador.