Gestoras podrán administrar fondos de $350 mil y éstas podrían establecer cuotas mínimas de $100. Diputados excluyen considerando que exhortaba a la rentabilidad de los fondos de pensiones.

La Asamblea Legislativa aprobó ayer, con 74 votos, la Ley de Fondos de Inversión que promete incentivar la actividad económica “con el acceso de pequeños inversionistas al mercado de capitales, diversificación de inversiones y canalización del ahorro a sectores productivos”. Quedó fuera de la ley la posibilidad que los ahorros de pensiones sean invertidos en esa modalidad.

Parlamento también reformó la Ley de Lavado que permitirá indagar a ex funcionarios, familiares y sus allegados.

La Asamblea Legislativa aprobó anoche con 74 votos la Ley de Fondos de Inversión, una normativa financiera novedosa que permitiría desarrollar el mercado de las inversiones a través de la Bolsa de Valores. “Lo novedoso de esto es que se convierte en una herramienta financiera moderna que posibilita inversión extranjera y nacional a través de la Bolsa de Valores”, dijo el diputado de CD Douglas Avilés, presidente de la comisión financiera.

El optimismo económico se mantiene, pero las valoraciones son demasiado altas.

Olvídese de la Gran Moderación. La crisis del crédito reveló que era sólo un espejismo. Olvídese de la Gran Rotación. Los inversionistas nunca hicieron el cambio en masa de bonos a valores. Lo que tenemos hoy se asemeja más a la Gran Frustración.
Parece que los inversionistas sienten muy poco amor por cualquier clase de activos. Después de años de inyecciones de liquidez de los bancos centrales, los precios de los activos están inflados por encima de niveles cómodos.

El tira y afloja de los competidores más pequeños impulsa las innovaciones importantes del diario.

“Se necesitan muchos triángulos de Harberger para llenar el vacío de Okun”, escribió
James Tobin en 1977, cuatro años antes de ganar el Premio Nobel de Economía. Quiso decir que el gran problema en la economía no era luchar contra los monopolistas, sino prevenir las recesiones y promover la recuperación.

El propietario de la franquicia para Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador, Álvaro Cofiño, evaluó el mercado y el entorno económico

La empresa de Álvaro Cofiño, McDonald's Mesoamérica, maneja la franquicia en El Salvador desde 2009. En los primeros años, sus ventas en el país aumentaron cerca de 15 por ciento en promedio anual, asegura el empresario. Ello, a pesar de que la economía del país es la que menos ha crecido en Centroamérica en ese periodo.