El grado otorgado por la calificadora de riesgos establece que el perfil crediticio de El Salvador (B3 Estable) es apoyado por la perspectiva de una economía con un promedio de crecimiento anual de 2.1%.
No obstante, Moody’s remarca que la dolarización de El Salvador es una limitante para el Gobierno, ya que lo deja “sin herramientas monetarias para suavizar los ciclos económicos, la misma ha resultado con una tasa de inflación baja y estable, bajas tasas de interés y riesgo de intercambio nulo”, sostienen.
“La fortaleza fiscal “moderada (-)” de El Salvador refleja la carga elevada, aunque estabilizadora, de la deuda y los intereses del Gobierno. El final de un estancamiento político prolongado en la Asamblea Legislativa ha restablecido el acceso al financiamiento a largo plazo para el Gobierno y ha reducido sustancialmente los riesgos de liquidez”, apunta el informe.
Publicado en Finanzas por Redacción de Dinero.com