El mercado de las bolsas de valores conjunto de El Salvador y Panamá logró recuperar el ritmo de crecimiento que perdió durante el segundo trimestre del año por la pandemia del covid-19 y los expertos vaticinan un repunte en 2021 por la búsqueda de los inversionistas en diversificar riesgos.
El mercado integrado inició operaciones formales en mayo de 2017 y a partir de esa fecha se ha negociado (acumulado a octubre de 2020) un monto de $198 millones, negocio generado por nueve operadores remotos que son Casas de Corredores de Bolsa de Salvador o Puestos de Bolsa de Panamá que están autorizados para ingresar y negociar remotamente en los sistemas de ambas Bolsas de Valores, a través de 1,009 operaciones.
Solamente este año, a octubre, reportaron $48.8 millones negociados, lo que significa un crecimiento del 11.9 % comparado con los $43.6 millones del mismo período de 2019. Los expertos apuntan que para cierre de año, en el mercado se puede llegar a los $60 millones.
Para Valentín Arrieta, gerente general de la Bolsa de Valores de El Salvador (BVES), estas cifras dejan ver lo exitoso que ha sido este primer mercado integrado y lo necesario que era abrir la oferta y demanda de ambas plazas para satisfacer las necesidades y exigencias de los participantes.
En 2020, el mercado integrado comenzó con buen ritmo y en el primer trimestre acumulaba 84 transacciones con un monto de $15.2 millones, lo cual era un 375 % superior a los $3.2 millones en 57 operaciones reportados al mismo período de 2019, según datos de la Bolsa de Valores de Panamá (BVP).
Sin embargo, con la pandemia y paralización económica, hubo una fuerte caída y de abril a junio se transaron solamente $2 millones en 22 operaciones (85.7 % menos comparado a los $14 millones de 87 operaciones en el año pasado).
En el período de julio a octubre se vio una tendencia al alza y acumulaban $31.6 millones en 130 operaciones, lo que representa un crecimiento del 20.1 % comparado a los $26.3 millones del mismo período de 2019.
“Al ver la trayectoria del mercado durante 2020, lo calificamos como un muy buen año a pesar de la incertidumbre y los cierres de nuestras economías por la crisis de salud por covid-19”, opina Arrieta.
Por su parte, Patricia Duarte, gerente general de SGB Casa Corredora (operador remoto autorizado) considera que, a la fecha, han existido muchas inversiones en instituciones financieras de Panamá con buena calificación de riesgo; sin embargo, debido a la incertidumbre por la pandemia y las repercusiones económicas, dice que es importante darle seguimiento a los emisores, sobre todo, en el tema del deterioro de la cartera de créditos.
Para 2021, los expertos esperan ver un crecimiento en volumen transado así como, al menos, la suma de otro operador remoto y nuevos productos, como emisiones de “Bonos Verdes” y los Certificados de Depósito Negociables (CDN).