La Prensa Gráfica Por Leonel Ibarra
27 de Diciembre de 2021 - 00:00 HS

El mercado de valores primario privado de la Bolsa de Valores de El Salvador (BVES) suma emisiones por un valor de $492 millones, lo que significa que ha experimentado este año un crecimiento del 180 % comparado con 2020.

Para obtener capital fresco, las empresas tienen la opción de emitir instrumentos bursátiles que se pueden comprar directamente a la empresa emisora. Esta es la primera oportunidad para que los inversionistas compren un nuevo valor y es accesible a través del mercado primario. A su vez, la empresa emisora recibe los recursos, que destinará a los fines de inversión o gasto que requiera.

Una vez que los valores se venden al público a través del mercado primario, las ventas posteriores tienen lugar en el mercado secundario.

Valentín Arrieta, director ejecutivo de la BVES, expresa que se sabía que habría un crecimiento comparado al año pasado, pero este sobrepasó las expectativas.

"Estamos sorprendidos porque el año ha sido muy bueno para el mercado, tomando el contexto del que se viene saliendo y un proceso de recuperación económica", dice Arrieta.

La importancia de que el mercado primario haya tenido un crecimiento tan robusto, sobre todo en el segundo semestre, es que es un indicador que las empresas están buscando capital nuevo para financiar sus proyectos que estuvieron en pausa en 2020

Hasta el 23 de diciembre, la BVES reporta que se tenían $3,575 millones en volúmenes negociados, lo cual es superior a los $3,200 con los que ese habían proyectado cerrar el año.

Si bien esta cifra total es 2.5 % superior a lo reportado en 2020, todavía está un 13.6 % por debajo de los $4,138 millones logrados en 2019.

De estos $3,575 millones, $922 millones corresponden al mercado primario (público y privado), $829.4 millones en el secundario, $311.4 millones en el internacional y $1,245 millones negociados en el mercado de reportos.

Actor clave

La titularización fue la base principal de dicho crecimiento en las colocaciones en el mercado primario. Este año se realizaron dos muy importantes: una de la Alcaldía de San Salvador (por $124.5 millones en agosto, la más grande hasta la fecha) y otro de el ingenio azucarero El Ángel (su primera, por $103 millones) y que continuará dando impulso al sector.

Por su parte, el mercado secundario tuvo un decrecimiento de -26 % comparado al año pasado, que se debe, explica Arrieta, a que la mayor actividad fue en 2020 por el reacomodo del portafolio de los participantes.

Al haber más disponibilidad de títulos para invertir en el mercado primario, por ahí vino el reordenamiento de las oportunidades de negocios.

"Entonces, al tener incrementos de más de 100 % en el mercado primario, los volúmenes no igualaron en el mercado secundario", agrega el directivo.

En cuanto al mercado integrado que El Salvador tiene con Panamá, en 2019 se negociaron $68 millones, en 2020 disminuyó a $60 millones, pero hasta este mes de diciembre ronda los $65 millones.

"Esto muestra la robustez y credibilidad a casi cinco años del lanzamiento de este mercado de valores integrado con Panamá", considera Arrieta. En esa plaza desde 2017 se han hecho 1,640 transacciones de inversionistas de ambos países. El acumulado en volúmenes negociado suman $285 millones.

Del lado salvadoreño, los instrumentos que más se han tranzado han sido certificados de inversión, papel bursátil y valores de titularización. Por parte de Panamá, los valores comerciales negociados y las acciones preferentes, fueron los de mayor movimiento.

Además, se sumaron este año dos casas corredoras como agentes remotos.

Sobre el proceso de integración de otras bolsas, Arrieta explica que esto depende de las regulaciones internas de cada país.

Este año, la BVES ha continuado trabajando con instituciones como AMERCA, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) para avanzar en este proceso e implementar nuevos modelos operativos que permitan realizar operaciones de corresponsalía de manera más eficiente, ya que este es el paso previo para la integración de otras bolsas de la región.

Planes

La innovación en la oferta de instrumentos y la forma de hacer negocios en el mercado de valores salvadoreño serán algunos de los planes que desarrollará la institución el próximo año.

En agosto de 2021, la BVES presentó la "Guía de bonos verdes, sociales y sostenibles para el mercado de valores" y serán las bases para la emisión de estos instrumentos, lo que abra las puertas para una nueva forma de financiamiento.

Los requisitos para emitirlos son cumplir con lo establecido en la Ley de Mercado de Valores de El Salvador, cumplir con los estándares de la guía y contar con la opinión de un tercero independiente acreditado para verificar el cumplimiento de las mismas.

Los proyectos que se pueden financiar con estos bonos son: generación de energía renovable, eficiencia energética, gestión del agua, transporte limpio, seguridad alimenticia, acceso a servicios y vivienda asequible, entre otros.

Arrieta dice que este tema está tomando mucho auge en los códigos de gobierno corporativo y la colocación de recursos en este tipo de proyectos sociales o de sostenibilidad ambiental.

Por ello, adelanta que hay planes de una posible emisión del primer bono sostenible de un actor local "que va adelantada y se podría emitir en el primer trimestre de 2022".

"Va persiguiendo el componente verde mediante emisiones de energía limpia y lado social, es decir con un componente de apoyo a entidades que financian a pymes lideradas por mujeres", dice.

Además, presentaron un anteproyecto de reforma a la Ley del Mercado de Valores, la cual tiene 20 años, y ha sido concensuado con diversos actores e incluirá un capítulo para atender al segmento de las micro y pequeñas empresas, mediante sesiones especiales de negociación donde puedan ofrecer instrumentos emitidos como acciones.

Actualmente está en manos de las entidades reguladoras como un paso previo a presentarlo a la Asamblea Legislativa.

"Queremos que esto sea el impulso para los siguientes 10 o 15 años, las leyes deben evolucionar en la medida que los mercados cambian y va pidiendo esos cambios", señala el directivo de BVES.

Otro de los planes que ejecutarán en 2022 es potenciar el uso de la app y transacciones de manera digital para ordenes de compras y venta.

Con estos proyectos, Arrieta espera que el mercado de valores aporte en el proceso de recuperación económica al ser un canal complementario de recursos.