Martín Fernández-Romero, director general de Moody’s Local en América Latina, comparte su visión de la región, a la que entran de lleno después de la adquisición de SCRiego.
La Prensa Gráfica. Por Irma Cantizzano. 13 DE NOVIEMBRE DE 2023 00:01 HS - GMT-6
Moody’s anunció el año pasado que adquirió la empresa calificadora SCRiesgo que opera en Centroamérica. La transacción de compra finalizó después de recibir las autorizaciones necesarias y recientemente lo anunciaron en los mercados del istmo; El Salvador fue uno de ellos, donde Martin Fernández-Romero, director general de Moody’s Local en América Latina, conversó con LA PRENSA GRÁFICA sobre los planes que tiene, cómo están creciendo los mercados de capitales, y también como la integración regional es el camino correcto para la profundización de las plazas.
"Me parece ir hacia esa integración de los mercados, darle más volumen, para poder tener emisiones de tamaños más significativos, y que los puede absorber sin problema en la comunidad de inversionistas", asegura.
¿Por qué se decantaron por SCRiesgo y qué ha implicado este cambio?
Creo que tendríamos que empezar con comentar un poquito por qué Moody’s tomó esta decisión; esto se escribe dentro de una estrategia general de Moody’s para incrementar y sostener su presencia en mercados de capitales domésticos de América Latina. En el año 2019 se lanza una plataforma nueva en América Latina que se llama Moody’s Local, que tiene justamente este objetivo de fortalecer y robustecer la presencia de Moody’s en los mercados de capitales de la región.
Hoy en día esa plataforma está presente en siete países, incluyendo México y Brasil, que son los dos mercados de capitales más grandes de la región, y estamos también en Perú, Argentina, Uruguay, Bolivia y ya teníamos presencia en Panamá hace unos años; y bueno, decidimos que Centroamérica era una cuestión importante para nosotros con mucho crecimiento potencial.
Queríamos entrar de la mano de un "partner" local, alguien que tuviera el conocimiento ya de los mercados locales de la región y buscando oportunidades dimos con SCRiesgo y Gary Barquero que es el socio fundador y encontramos una buena coincidencia de valores.
¿Van a seguir manteniendo por un período la marca SCRiesgo?
Por el momento se mantiene la marca, las metodologías que utiliza SCRiesgo y la totalidad del equipo, incluyendo a Gary (Barquero) como gerente general y todo el equipo analítico.
De a poco sí, nuestra idea es ir incorporando en tecnología en un sentido amplio a SCRiesgo, en el sentido de mejores prácticas estándares internacionales de cómo debe ser un proceso de calificación, como debe ser la relación con el mercado, conocimiento técnico, capacitación para los analistas, esperamos ir profundizando esa relación a lo largo de los próximos meses.
¿Cómo ven el crecimiento del mercado de capitales en la región y cuál es el sector que está despuntando?
Hemos visto un crecimiento en los mercados en general, en distintos grados de avance en los países de la región. En mayor o menor medida también dependiendo de la profundidad del mercado y la disponibilidad de ahorro interno; por ejemplo, como en el caso de El Salvador con los fondos de pensión. Una cuestión que sí, realmente nos interesa mucho y que desde nuestro lugar vamos a tratar de apoyar y contribuir de alguna manera en la integración de los mercados de Centroamérica. Creo que se han dado muy buenos pasos en ese sentido, hemos visto las bolsas muy activas, en términos de conseguir de a poco esa integración y eso es una gran cosa porque permite darle más volumen de operación; es decir que, compañías que están quizás domiciliadas en un determinado país puedan acceder, a colocar sus bonos en otros mercados.
En la parte del mercado, ¿qué tanto mercado tienen ustedes actualmente?
En el en el caso de El Salvador en particular, es un mercado que tiene varias agencias, y la verdad es como que está muy pareja la participación de todos los jugadores; pero debería aclarar que esos jugadores están hace mucho tiempo en el mercado y SCRiesgo está desde 2012 y han logrado posicionarse muy bien en un período de tiempo relativamente breve comparado con otros jugadores del mercado.
¿Y en la región en general, en Centroamérica?
SCRiesgo es líder en Costa Rica por ejemplo, y también en Nicaragua; tienen una participación reciente en Guatemala, en Honduras, y bueno, es muy reciente la obtención de la licencia en República Dominicana, que fue el año pasado. Para nosotros este es el punto de partida, lo que construyó Gary (Barquero) y todo su equipo de una manera muy sólida a lo largo de los últimos años.
Como Moody’s Local, ¿en qué mercados estaban?
Estamos en Brasil, México, Argentina, Uruguay, Perú, Bolivia y Panamá; en América Central solo teníamos Panamá y ahora estamos sumando estas operaciones en el resto de países de la región.
Cuando hablamos de calificación, ¿cuál es la diferencia entre calificaciones soberanas como trabaja Moody’s y como lo hace Moody’s Local?
Tenemos dos tipos de ratings, para calificaciones globales utilizamos la compañía y la marca Moody’s Investor Service, que este utiliza metodologías globales y calificaciones globales para uso de inversionistas internacionales.
A partir del 2019 lanzamos esta nueva marca que es Moody’s Local, que básicamente lo que hace es dar calificaciones que solo son comparables dentro de una determinada jurisdicción y tienen como objetivo poder distinguir el riesgo de crédito dentro de un determinado país.
Es una escala de calificación distinta y significa otra cosa, justamente distinguir el riesgo de crédito adentro del país ¿para qué? para uso de inversionistas y participantes del mercado en general, en términos domésticos. Esto lo que nos permite es tener un muy buen modelo que básicamente cuando un inversionista quiere hacer una calificación local, puede mirar la de Moody’s Local, si quieres ver la calificación internacional puede ver la calificación que le asignamos con Moody’s lnvestor Service.
¿Qué tanto influye o incide en la calificación local la calificación internacional?
En este modelo no influye, justamente lo que hicimos es tratar de segregar, lo que es el riesgo del soberano de las calificaciones locales; porque al estar siendo comparadas dentro de un país el riesgo del soberano se considera aplicable a todos los emisores de una determinada jurisdicción y lo que nos decían los inversionistas, justamente es que querían diferenciar el riesgo sin tener la consideración del riesgo soberano; ellos pueden obviamente ver una calificación global para incorporar ese riesgo soberano.
¿Y el techo "país"? En el caso de El Salvador que es Caa3...
Cuando uno mira las calificaciones adentro de El Salvador puede haber instituciones que sean las más fuertes dentro de El Salvador, independientemente de que la calidad de crédito del soberano sea relativamente baja comparada con otros países; lo que hacemos como Moody’s Local, es decir: ¿Bueno, cuál es el mejor banco dentro de El Salvador? y ese banco es triple A de El Salvador, entonces le agregamos un sufijo que indica que esa calificación sólo aplica adentro de ese país. Por eso digo que está disociada de la calificación del soberano, porque justamente cuando tú tienes países que tienen una calificación relativamente baja eso si te comprimiría muchísimo las calificaciones, lo que hacemos con Moody’s Local es ampliar toda esa escala para poder diferenciar mejor cuáles son los mejores de los peores créditos dentro de un determinado país.
Lo que pasa que siempre hacen como la salvedad en las calificaciones locales que hay presión por la situación soberana...
Puede haber casos, casos puntuales donde la calidad del soberano afecta un determinado sector en particular; entonces, que hay una medida X en un determinado país que afecte un determinado sector bueno, esa es una consideración de crédito que hay que tener en cuenta, pero no es una regla automática, los analistas en su caso evalúan como esa medida tomada por el soberano afecta a los bancos o afecta al sector minero o al sector de agro, etcétera, eso se reflejará en las calificaciones; pero lo que quiero decir, es que no es automático, no baja el soberano y bajan todos los rating de los bancos, eso lo hemos solucionado con las calificaciones de Moody’s Local. Moody’s no operaba así y con esta plataforma decidimos hacer esos cambios para dar más información a los inversionistas locales.
¿Están ingresando empresas que anteriormente no estaban en el mercado de capitales y hoy lo están viendo como una opción?
Sí, vemos más emisores, esto depende un poco de cada mercado, hay distintos grados de avance en los distintos países de la región, pero la verdad es que sí, vemos más empresas sumándose. Vemos nuevos productos y también...
Podemos hablar de mercados y ver dónde es que hay más demanda.
Sí, a ver yo diría, en términos generales quizás los mercados más avanzados donde vemos más profundidad son Costa Rica, Panamá obviamente y El Salvador; República Dominicana también tiene un mercado interesante. Todos los países tienen su mercado, me parece que para generar volumen, masa crítica y profundidad en el mercado en profundidad, me refiero que los emisores puedan acceder a colocar bonos de un volumen mayor es clave. Me parece ir hacia esa integración de los mercados, darle más volumen, para poder tener emisiones de tamaños más significativos, y que los puede absorber sin problema en la comunidad de inversionistas.
Hoy en día cuando uno mira mercados, por ejemplo, como México o como Brasil, podemos ver colocaciones realmente muy potentes de $1.5 o $2 billones sin problemas en el mercado local.
Claramente el volumen de esas economías es distinto, pero lo que quiero decir es que hay una profundidad grande y el mercado local realmente se transformó en una alternativa para incluso los grandes emisores, que tradicionalmente buscaban como única opción para grandes proyectos el mercado internacional.
Esos volúmenes hace unos años era realmente impensado que se pudieran colocar a nivel doméstico y hoy en día, son absorbidos sin ningún inconveniente... Es posible, hay que encontrar la forma de darle volumen a los mercados.
¿Considera que se está democratizando también el acceso a los mercados de capitales?
El tema de la democratización, creo que eso tiene un ángulo que tiene que ver con la tecnología, y me parece también que los mercados de capitales generalmente estaban, reservados; la mayor parte de la participación estaba dedicada en personas institucionales, es decir fondos de pensión, compañía de seguros, bancos, etcétera... Me parece que lo que hace la tecnología justamente es ampliar la base de participantes en el mercado, lo cual es una gran cosa. Un buen ejemplo de esto es lo que está ocurriendo en Brasil, que justamente a través de aplicaciones en el celular los inversionistas individuales, las personas físicas, pueden acceder a participar en el mercado comprar un bono o no solo en renta fija, en renta variable, también obviamente acciones con mucha más facilidad. Yo creo que la tecnología facilitó ese acceso y me parece que es una tendencia que eventualmente va llegando a todos los mercados, es una cuestión de tiempo nada más.
¿Ha cambiado el perfil del inversionista?
En Brasil la verdad es que eso es muy generalizado, casi cualquier persona tiene la aplicación y puede comprar o vender, hacer transacciones en el mercado. Ahí sí hay un rol me parece importante nuestro, pero también de los reguladores, del mercado en general, en términos de mejorar la educación financiera; porque obviamente hay cierto conocimiento, cierta complejidad que tiene, la evaluación de la compra de un bono, entonces me parece que hay que hacer mucho más trabajo en la región en términos de mejorar la educación financiera, porque no es cuestión simplemente de que esté disponible el bono sino que la gente pueda tomar una decisión informada y sabiendo cuáles son los riesgos.
¿Quién es?
Martín Fernández
-Romero Director general de Moody’s Local en América Latina, quien comparte su visión de la región.